Esta mañana hemos estado presente en el acto de bendición de un monolito en la Casa del Canelo, en el camino de Bonares, una iniciativa promovida por las hermandades que transitan por estos senderos cada primavera: Niebla, Villarrasa, Lucena, Valverde, Trigueros, Badajoz, Bonares y Rociana.
La idea de este monumento nació hace varios años y, aunque en un principio quedó aparcada sin ningún motivo reseñable, fue el pasado dos mil veinte cuando retomamos la idea. Con este fin común nos reunimos los presidentes de las hermandades que formamos el llamado Camino de Bonares: Rociana del Condado, Lucena del Puerto, Bonares, Valverde del Camino, Villarrasa, Trigueros, Badajoz y Niebla, para hacer realidad esta idea.
El monumento consiste en un monolito con la imagen de la Virgen en una cara; el nombre de las hermandades con sus medallas en la posterior y en los laterales, textos de la fe rociera. Su ubicación será la explanada conocida como Casa del Canelo, sitio muy venerado por los rocieros de las hermandades que en el camino de vuelta coincidimos para el rezo del Ángelus, oraciones, abrazos, recogimiento y al final… mucha alegría.