Como un niño,… con los ojos abiertos de par en par a la vida, brillantes y llenos a rebosar de inocencia, por bandera llevo una sonrisa siempre en mis labios, camino por el mundo con desparpajo dispuesto a recibir tus palabras y tus consejos, y por que no también alguna regañina que otra cuando la cosa se tuerce.
Recuerdo aquellos días pasados, como si fuera hoy, fue como una venida, como un nuevo renacer, fue allí junto a Ti cuando comencé a descubrir y a entender todo lo que ocurría a mi alrededor, un maravilloso mundo me esperaba ansioso y yo también lo esperaba a el.
Así fueron pasando los años y cada vez crecía más este sentimiento, parecía no tener fin, y hoy puedo decir sin temor a equivocarme que no tiene medida. A veces pienso si puede llegar a ser una obsesión, pero son más las que doy gracias a Dios por que no encuentre nunca el remedio a esta bendita locura.
Aún hoy sigo sorprendiéndome, sigo aprendiendo, en definitiva, sigo empapándome de este sentir rociero que encuentro y busco por mi mundo,… por vuestro mundo. Su vitalidad me hace levantarme mil veces cuando la vida se tuerce y los días se ponen del revés, cuando doy un paso atrás siento tras de mi ese abrazo reconfortante que me hace continuar y si las lágrimas me impiden decidir el camino a elegir noto como la brisa marismeña rápidamente las recoge para después impulsarme a un nuevo carril, a una nueva senda repleta de bendiciones.
La ilusión, la felicidad, la fe, la esperanza,… son algunos de los adjetivos que emanan de esta fuente llamada Rocío, sus aguas puras y cristalinas corren por tierra, mar y aire inundando los corazones de aquellos que se arrodillan con humildad para beber con devoción de sus tradiciones. Allí, aquí, estemos donde estemos, sea de día o sea de noche, sin importar la edad, la condición, la raza, el sexo, todo el mundo tiene cabida en este paraíso de Amor eterno, donde se palpan y se pueden respirar los sentimientos más bellos jamás imaginados por el hombre.
Que suerte Dios mío, te doy mil gracias, por ser como soy y estar donde estoy, gracias por haberme llevado hasta a Ella, gracias por haber nacido en una familia tan rociera y por haber crecido soñando estar en sus andas.
Sin duda soy una persona afortunada por todo lo que he recibido, y te prometo no defraudar a los míos y luchar diariamente en cada batalla y en cada trinchera con mis palabras y mis actos, porque aún sigo siendo aquel niño que sigue ilusionándose al caminar por las arenas, porque aún me siguen brillando los ojos al llegar Pentecostés, aún recuerdo quien soy y donde estoy, que hay que hacer y que no debo hacer, aún sigo lleno de esperanza y rebosante de fe, aún el corazón se me acelera al pensar cuando y donde podré sentir tus andas sobre mis hombros en ese mañana mágica cuando delante de Ella recuerdo a todos mis seres queridos y le pido con humildad salud para los míos.
Yo seguiré siendo aquel niño y jamás perderé esta maravillosa herencia, sé perfectamente que necesita para continuar conviviendo en armonía con mi alma, necesita respirar diariamente suspiros de humildad y bocanadas de felicidad, necesita saciar su sed con el rocío de la fe y alimentarse con mucha devoción, pero sobre todo necesita latir al compás de un corazón que rebose Amor, y en el mío tengo la inmensa fortuna que siempre estás Tú.
Un abrazo a todos.
VIVA LA VIRGEN DEL ROCÍO!!!!!!
Bajo Guía (Miembro del Foro del Rocío)