Su autor fue el artesano local Juan Muñoz Fernandez, conocido como «El Zagalejo». Comenzó desde su juventud a la decoración de las calles para las Cruces, esta elaboración artesanal pasó a los exornos en las Venidas de la Virgen al pueblo.
Las primeras referencias de la ornamentación para recibir a la Patrona, data de 1887, colocándose dos arcos de romeros en las calles Venida de la Virgen y El Cerro. Pronto comenzaría a introducirse cadenetas de papel y las actuales flores de seda. En la Plaza, conocida como «El Paseo», levantaban una decoración muy modesta hasta que Juan Muñoz intervino realizando y colocando un arco de madera de gran envergadura en la Venida de 1949. Es conocida como el primer arco de madera.
Este Arco fue colocado en los Traslados de 1949, 1956 y 1963, con la estimada ayuda de sus aprendices Matías Aceitón y Juan Antonio Acosta, quien tiempo después serían auténticos maestros de la arquitectura efímera jamás realizada en los Traslados de Ntra. Sra. del Rocío.
Javi el almonteño