Las hermandades de Huelva y Emigrantes terminan un Rocío “distinto” que han vivido más unidas que nunca con una emotiva Misa de acción de gracias concelebrada por el obispo de Huelva, José Vilaplana, y los capellanes y directores espirituales de ambas hermandades, José Antonio Omist y José Manuel Barral, respectivamente y que contó con el acompañamiento musical de Raquel Martínez y Abraham Cruz.
El obispo de Huelva recordó durante su homilía a los rocieros de Huelva que no hay nada más importante que “cuando se comparte con una Madre esos momentos de bondad y ternura” como han venido haciendo unidas estos días las dos hermandades de Huelva. “Creo que no hay nada que honra más a una madre que cuando le dicen que su hijo se le parece”. Añadía el prelado que “cuando intentamos peregrinar hacia la Virgen y tener esos momentos de encuentro con Ella es muy importante que de las madres aprendamos las lecciones que nos dan. Muchas veces en silencio, sin hablar. Más por lo que hacen que por lo que dicen y de la Virgen María nosotros aprendemos esa lección de ternura, lección de misericordia, lección de ojos atentos a las necesidades de los demás y también la lección de la firmeza y la fortaleza en la fe”.
Huelva, 4 de junio de 2020