Este primer viernes del mes de agosto, una vez más, las puertas de la Casa Hermandad del Rocío de Isla Cristina se abrieron para, a las doce de la noche, cantar la Salve al Bendito Simpecado que posa en la carreta. Y, de nuevo, ante una Plazoleta de San Francisco muy concurrida, se produjo el silencio cuando comenzaron los primeros acordes de la guitarra de Francisco López uniéndose a las voces de Pepe Vázquez y Antonio Vázquez, los integrantes del Grupo «Aires del Sur» de Cartaya que cantaron la Salve tan famosa de Los Romeros de la Puebla.
Y continuaron no sólo con las cuatro sevillanas de rigor que se tiene por costumbre, sino que se lanzaron, además, con mucho más, haciendo con ello que todo el público congregado rompiera continuamente con grandes aplausos y se animaran a acompañarlos con el baile por sevillanas. Sin duda, una noche más de ese «ratito de Rocío» que desde la Hermandad isleña se quiere transmitir cada vez con esa oración cantada, intentando que llegue ese sentimiento cristiano del rociero y con el Grupo «Aires del Sur», desde luego, se consiguió.
Ante la Carreta del Simpecado, el Presidente y las Hermanas Mayores con el Grupo «Aires del Sur»