Una vez más, las puertas de la Casa Hermandad del Rocío de Isla Cristina se abrieron para el canto de la Salve el pasado viernes día 15 de Septiembre. Una noche en la que ya se va notando que vamos a cambiar de estación, puesto que la Plazoleta San Francisco se ve menos concurrida, aunque en el momento del toque de campana anunciando el comienzo de la Salve son muchos los que se acercan para vivir ese ratito de Rocío. Y así, con los acordes de la guitarra de nuestro querido Antonio Rodríguez «El Pirata», Noemí de los Santos comenzó a cantar, con esa voz desgarradora y melodiosa que la caracteriza, la Salve rociera de Pareja Obregón, haciendo con ello que la ovación fuera muy fuerte.
Después de recibir los regalos que la Hermandad entrega tanto a Antonio Rodríguez «El Pirata» como a Noemí de los Santos, siguieron las sevillanas. Sevillanas con palabras llenas de amor y oración para la Madre de todos los rocieros que la hicieron emocionar y que la contagió a todos los que tuvimos el privilegio de escucharla. Y luego llegó la sorpresa; algo inusual y que nunca había ocurrido a las puertas de la Hermandad y es que su novio quiso, delante de todos y, sobre todo, delante del Simpecado pedirla en matrimonio. Un momento, sin duda, mágico que fue la guinda con la que, de esa forma tan hermosa, culminaron los sentimientos que corrieron por todos los rincones de la plazoleta y en los corazones de los que pudimos vivirlo.