Una noche más, al toque de la campana de nuestra Casa Hermandad, se cantó la Salve a nuestro Bendito Simpecado a la hora establecida por parte de todos los hermanos y hermanas que ante él se congregaron, lo que hizo que el acto fuera más íntimo que en otras ocasiones por ser una noche bastante fría.
De cualquier manera, la convivencia que allí se mantuvo durante toda la noche, no cabe duda, sirve para afianzar más los lazos de unión entre todos los hermanos y hermanas de nuestra querida Hermandad.
Las distintas fotos muestran momentos de esa noche y culmina con una nueva imagen de los Hermanos y Hermanas Mayores para la próxima Romería y que esperan con anhelo y mucha ilusión la llegada de los hermosos momentos que les quedan por vivir al lado de nuestro querido Simpecado.
Crónica Vocalía de Prensa: