El sábado 16 de Agosto, una vez más, a las doce, al toque de campana, comenzó el canto de la Salve al Simpecado de la Hermandad del Rocío de Isla Cristina, corriendo a cargo de Manolo Correa que interpretó una Plegaria a la Madre de Dios llena de sentimiento, de amor incondicional a Ella. Porque a Manolo Correa, cuando coge la guitarra y se pone delante de Ella, se le abre el corazón y con sus interpretaciones, hechas oraciones, desgrana su vida espiritual de tal manera que hace que todo el que lo escucha se impregne de esas letras, las haga suyas y la emoción salte a flor de piel.
Es difícil expresar con palabras todo lo que iba contando con cada sevillana que interpretó Manolo Correa, inclusive cuando a él mismo se le quebró en varias ocasiones la voz. Pero lo que en definitiva cuenta es que impregnó de todo ello cada rincón de la plazoleta y de la Casa Hermandad y que es un orgullo para la Hermandad del Rocío contar siempre con él porque sabemos que, en su caso, lo que manda es el corazón.