La AECC ha querido ofrecer a Nuestra Señora del Rocío de Torremolinos su insignia. Insignia que representa la labor diaria que lleva a cabo esta asociación y que basa sus fines en 3 pilares fundamentales: INVESTIGACIÓN, PREVENCIÓN y ATENCIÓN AL PACIENTE Y SUS FAMILIARES.
Desde el jueves 6 de mayo, el Glorioso y Bendito Simpecado de la Virgen del Rocío de Torremolinos luce la insignia de oro de la AECC Benalmádena – Torremolinos.
El pasado jueves 6 de mayo, el Glorioso y Bendito Simpecado de Ntra. Sra. del Rocío de Torremolinos, recibía por parte de Doña Luisa Jiménez, Presidenta, y de Doña Paqui Guerrero, Presidenta de Honor, el escudo representativo de la Asociación Española Contra el Cáncer Benalmádena – Torremolinos.
El acto celebrado en la Parroquia de Ntra. Sra. del Carmen de la Carihuela, sede canónica donde está establecida canónicamente la Hermandad del Rocío de Torremolinos, participaron la Doctora Doña Francisca Mañas, Delegada del Colegio de Médicos de la Provincia de Málaga (Commálaga) en Benalmádena y Doña Francisca Silva, del Centro de Salud de San Miguel de Torremolinos, las voluntarias y miembros de la asociación; Ana Cardeñas, Toñi Rueda, Josefa Luque y Gracia Evangelista y los miembros de la Hermandad; Miguel González, Consuelo Higón y M. Carmen Piña.
Un acto cargado de emoción y de esperanza, en el que tanto la Presidenta de la AECC, Luisa Jiménez, como la Presidenta de Honor, Paqui Guerrero tuvieron palabras de ánimo y de apoyo para todos los presentes. Sonia de Sousa, Hermana Mayor de la Hdad. de Ntra. Sra. del Rocío de Torremolinos cerró el acto diciendo; “Es importante reconocer y agradecer a entidades como la ASOCIACIÓN ESPAÑOLA CONTRA EL CANCER la labor que realizan, casa donde todo el mundo es bienvenido y donde siempre hay un voluntario que te escucha y ayuda a superar los obstáculos que se presentan.
Nuestra Madre del Rocío es la Madre de todos, y siempre está al lado de todos sus hijos. Ella es consuelo del afligido y salud de los enfermos, por eso en este día, nos encomendamos a Ella y le pedimos que siga velando por todos sus hijos enfermos de Cáncer, por los profesionales que trabajan para erradicar esta enfermedad y por los familiares, cuidadores y voluntarios que acompañan a los pacientes en esa lucha constante” Así concluía un acto muy esperado y deseado por parte de los rocieros de Torremolinos, describiéndolo como inolvidable.