No es difícil adivinar a simple vista sobre el origen de esta fotografía, que evidencia en un primer plano que se trata de una de las Venidas de la Santísima Virgen del Rocío a su pueblo de Almonte. Portadoras de infinitas promesas aparecen inmortalizadas las mujeres almonteñas que ostentan en sus manos varios enseres de plata de su Excelsa Patrona, tras recorrer un largo camino, tradición esta que se origina precisamente en este Traslado, el de 1939, con motivo de la finalización de la Guerra Civil española.
Enmarcando la estampa aparecen otros elementos fundamentales del camino, como eran los faroles que iluminaban el trayecto durante la oscura noche, faroles documentados ya en el siglo XIX y utilizados por última vez en 1956.
Como estampa atípica en esta tradición que actualmente se celebra cada Siete Años, sobre la plaza principal de Almonte que está ricamente exornada para el recibimiento de la Virgen, aparecen sobre ella una representación con sus insignias de la Hermandad del Rocío de la ciudad de Huelva, un hecho inaudito, presidiendo junto a ellos el actual Simpecado estrenado ese mismo año para la Romería, realizado en los talleres de Victoria y Esperanza Elena Caro.
Como agradecimiento a la finalización de la Guerra, Huelva quiso sumarse al pueblo almonteño, recibiendo la dicha Hermandad a la Señora en la plaza que lleva su nombre. Tenemos constancia de la presencia de varias Hermandades Filiales del Rocío, invitadas expresamente por la Matriz, para participar en varios actos producidos en las distintas Venidas en las décadas de los años 20 y 30, por ejemplo como la de 1932, en la que asistió una pequeña representación de las Hermandad de Rociana del Condado con sus insignias para recibir a la Imagen de la Virgen en el Chaparral.
Huelva volvió a hacer gala de ella en la procesión de Reina de la Blanca Paloma por Almonte el 28 de abril de 1940, donde las crónicas atestiguan la presencia de esta Hermandad presidiendo con su «Simpecado» la procesión de la Santísima Virgen del Rocío por las calles del pueblo, una estampa que no se ha vuelto a producir.
Traslado de la Virgen del Rocío a Almonte de 1939. Fotografía de la familia Rojas Acosta, realizada en la plaza que lleva su nombre.
©Javi el almonteño