La Línea va por el Coto y Algeciras por Los Llanos

Las hermandades rocieras de la Línea y Algeciras han preparado ya todo para partir hacia El Rocío. La romería se celebra entre el sábado 3 y el lunes 5 de junio pero ambas hermandades se van antes al camino. La Línea lo hace el lunes 29 de mayo por el coto de Doñana mientras que Algeciras se va el jueves 1 de junio hacia Almonte, dos caminos distintos en cuanto a recorrido y vivencias.
La Línea sale el lunes para emprender el camino por Doñana. Los rocieros parten tras la misa de romeros hacia Sanlúcar, donde está previsto que embarquen sobre el mediodía del martes para cruzar el Guadalquivir. Para las nueve de la mañana del lunes está prevista la misa de romeros, adonde habrá llegado poco antes el Simpecado ya colocado en su carreta. Terminada la misa, la carreta y los peregrinos toman el camino de nuevo hacia la casa hermandad, desde donde parten hacia Sanlúcar. Una vez en la población ribereña se procede al acondicionamiento de los vehículos. A las ocho de la mañana está prevista la diana. Antes, muy de madrugada, habrá salido de La Línea otro contingente de peregrinos para incorporarse a la Hermandad. Sobre las nueve y media de la mañana está previsto que se salga de Las Piletas hacia Bajo de Guía, en la desembocadura del Guadalquivir, para embarcar hacia Doñana. La Línea será un año más la primera Hermandad de la provincia que cruce el río. Sobre las doce estará toda la Hermandad al otro lado, en Malandar, y entonces se procederá al rezo del Ángelus antes de iniciar el camino por el coto.

La primera jornada en Doñana tendrá como destino inicial el Palacio de las Marismillas, donde se hará la parada del almuerzo y de la siesta. Una vez recuperadas las fuerzas tras una primera caminata de gran dureza, la Hermandad seguirá hacia Carboneras. Esta primera jornada supone andar unos catorce kilómetros de arena por terrenos muy difíciles. Como cada día, sobre las once de la noche se rezará el rosario junto al Simpecado. La jornada del miércoles es tan dura como la anterior. Los rocieros partirán tras la misa, sobre las diez y media de la mañana, con dirección al Cerro de los Ánsares, uno de los parajes de mayor belleza del coto pero con unos niveles de dureza extremos. El almuerzo será en el Corral de Félix y tras el descanso se partirá hacia el Palacio de Doñana, el lugar más parecido a la civilización que se encuentra en todo el camino de Sanlúcar al Rocío. En este punto hay mayores posibilidades de abastecimiento de agua y el terreno permite un mayor descanso por las extensiones de hierba que allanan la superficie y hacen más cómodo el desplazamiento. Esta segunda jornada también alcanza una distancia cercana a los catorce kilómetros, aunque de mayor dureza que el primer día por la dificultad de determinados parajes en los que los pies llegan a enterrarse literalmente en las arenas. La penúltima jornada de camino, la del jueves, discurre en principio por zonas de menor vistosidad. Desde Palacio se sale hacia la durísima Raya de las Perdices, un larguísimo cortafuegos en el que no hay respiro ni apenas sombra salvo la que se consigue, ya casi al final de la misma, bajo una encina que cobijo a la Hermandad en la que suele rezarse el Ángelus. Tras el descanso, los rocieros reemprenden el camino hacia el Aguaperal, donde se cena y se pasa la última noche.

El viernes llega la jornada final. A primeras horas de la tarde se llega a la Canaliega, final del camino. Allí, justo a la salida de Doñana hacia la carretera de Matalascañas, la Hermandad se reagrupa para la procesión de llegada a la casa, adonde está previsto arribar sobre las tres o las cuatro de la tarde. En ese momento, con la entrada de la carreta en la capilla, se da por terminado el camino al tiempo que se reza la salve de acción de gracias.

La Hermandad del Rocío de Algeciras comienza el camino el jueves 1 de junio aunque el miércoles 31 de mayo a las siete y media de la tarde será la misa de romeros en la parroquia del Corpus Christi. Terminada la misa se llevará a cabo la procesión de la Hermandad con el Simpecado ya colocado en la carreta. El destino es la iglesia de La Palma. Tras el saludo a la patrona, la comitiva se despedirá con el canto de la salve.

La salida hacia el Rocío será a las doce y media del mediodía del jueves 1 de junio para llegar a Almonte sobre las cinco de la tarde. Una vez en la villa almonteña comenzará el camino hasta llegar al lugar de la pernoctación, que son los pinares existentes detrás del Pastorcito. La Hermandad coincidirá en el lugar con otras hermandades que hacen el mismo camino. Algeciras recorrerá el camino que sólo cinco días antes habrá hecho la mismísima Virgen del Rocío en su regreso desde Almonte a su ermita. Los Llanos, un paraje bellísimo paralelo a la carretera de Almonte al Rocío se convertirá ese día en un lugar de constante trasiego de romeros.

El viernes por la mañana se celebrará la misa de alba y luego se reanudará el camino hacia la aldea, interrumpido a las doce para el rezo del Ángelus. Sobre las dos y media de la tarde está prevista la llegada de la Hermandad algecireña a la casa en El Rocío, donde las campanas repicarán con estruendo para dar la bienvenida a los peregrinos. Algeciras repite presencia este año en la céntrica calle Romería, la que conecta el Real con la plaza de Doñana.

Las dos hermandades, como cada año, celebrarán el primer acto oficial en la tarde del sábado. La Línea, filial número cincuenta, se presentará a media tarde mientras que Algeciras, que ha subido al número sesenta y cuatro tras la desaparición de Badalona, lo hará aproximadamente una hora y media después. Terminado el acto, los rocieros linenses y algecireños se retirarán a las casas de hermandad para sus actos de convivencia