I
El no llevaba caballo
Ni zahones ni medalla,
La chaqueta de to el año
Y una flor en la solapa
Un humilde carro viejo
Con cuatro flores adornao
Y una mulita tirando
De su familia a tos laos.
II
Ni tenía botos camperos
Ni pantalones a raya
Pero fue un gran rociero
Que más da lo que llevara
Era un hombre de la Virgen
De gran sencillez humana
Fue una estampa pa el recuerdo
Que siempre se echara en falta.
III
El no tenía ni techo
Pa en el Rocío quedarse
Solo aquel pequeño carro
Pa de la noche abrigarse
Y es que con ver a la Virgen
Ya de todo le sobraba
Y esperaba ese momento
En esa humilde morada.
IV
Ellos no podían faltar
Ni un domingo en el Rocío
Después de desayunar
Cerca de cuatro caminos
Esperaban al autocar
Que los llevara al destino
Rociero de verdad
Rociero y peregrino.
ESTRIBILLO
PERO DIOS SE LO LLEVO
PA QUE EN EL CIELO LE HICIERA
UNA CARROZA MAYOR
PA IR METIENDO ROCIEROS
HUMILDES DE CORAZON.
Juan Manuel Vaz Rey
