Voy galopando por el negro de tu pelo,
me voy perdiendo por la oscura inmensidad.
Será el amor que entró dentro de mis sueños
sin preguntar.
Me voy perdiendo por el brillo de tus ojos,
hoy de tus labios yo me voy a emborrachar.
En realidad yo soy dueño de mis sueños,
quizás mañana no los pueda recordar,
pero al final siempre quedará el misterio.
Una vez más, me iluminó tu nombre.
Y soñé todo cuanto quería.
Le puse fantasía,
colores a la noche.
Voy navegando entre nubes de colores,
la madrugada me ilumina la razón
y de la sombra nacerán nuevas canciones
que hablen de amor.
Voy consumiendo los espacios de la noche,
a mi guitarra se le ablanda el corazón
y a cada nota dulcemente me responde
con el encanto tierno y breve de su voz.
Una vez más se hizo música tu nombre.
Y soñé todo cuanto quería.
Le puse fantasía,
colores a la noche.
www.eduardopalencia.com