I
La conocí en la candela
una noche de camino,
y por una de esas cosas
comenzó a bailar conmigo.
Sonaba una sevillana
de una garganta quebrada,
y a los toques de tambor
nos cruzamos la mirada.
Estribillo I:
Nos miramos, sonreímos.
Sin mediar una palabra,
cuantas cosas nos dijimos
tan solo con la mirada.
II
A la luz de la candela
nos hablamos al oído,
refiriendo sentimientos
que esa noche habían nacido.
Al son de un cante por Huelva
que se oía muy lejano,
sus labios me susurraron
muy débilmente, te amo.
Estribillo II:
Nos miramos, sonreímos,
y empapados de rocío,
sus labios que eran de azúcar
se fundieron en los míos.
III
El toque del tamboril
despertaba la acampada,
y el primer rayo de sol
iluminaba su cara.
A ritmo de panderetas
avanzó la caravana,
tocando una alegre rumba
que los romeros cantaban.
Estribillo III:
Nos miramos, sonreímos,
y agarrados de la mano
como dos enamorados,
por la Raya caminamos.
IV
Se escuchaba una plegaria
al llegar al arroyuelo,
y de cansancio caímos
de rodillas en el suelo.
Se tiñó el agua de cobre
del sol rojizo en la tarde,
y sobre el puente se oía
con gran fuerza aquella salve.
Estribillo IV:
Esta vez no sonreímos,
pero sí que nos miramos,
y abrazándonos muy fuerte
como dos niños lloramos.
Enviada por: PACO MOLINA