I
Qué te pasa pastorcito
que te ha cambiao el semblante…
Tienes cerraos los ojitos
y no juegas en la calle.
No tienes arena en los botos
ni te mueves de tu madre,
y te acurrucas en sus brazos
como queriendo abrazarle.
II
La buscas entre sonrisas
pa que baje la mirada…
y ella no aparta la vista
de la cruz de su espadaña.
Le hace llorar el recuerdo
de aquellas horas amargas,
de tanto amor derramao
que apuntilló sus entrañas.
III
El niño se le ha sentao
en la esquina la peana…
con sus manitas en las sienes
no comprende lo que pasa.
Y la mira de reojo
no quiere decirle nada…
No desvele el sentimiento
que resbala por su cara.
IV
La Virgen ciñe a su niño
con más ternura que nunca…
que no despierte su rey
que no viste culpa alguna.
Y el pastor que es resalao
como almonteño de cuna,
lo apretuja entre su pecho
mientras lo duerme la luna.
Estribillo:
No puedes quitar su pena
la noche del Viernes Santo
no puedes quitar su pena,
tendrá que pasar el calvario
y entre la luz de las velas.
Enviada por: Alex