I
Canela pura
esa niña que baila,
salero que derrama
de su cintura.
Y en su vestío
se clavan los suspiros
del pecho mío.
II
Yo presumía,
cuando por la Rocina
montando a la morena
que más quería.
Llanto y tristeza,
que solo quedan canas
(y) en mi cabeza.
III
La besé un día
en el Cerro del Trigo
mirándome en sus ojos
que me comían.
Joven tu boca
que solo “quea” el calor
que da la copa.
IV
Y el pecho frío
con mi baza “doblá”
yo los veo pasar
para el Rocío.
Mi pensamiento
sin querer se me va
para otros tiempos.
Es una aportación de EL POETA PATATERO
manoli
que maravilla cada vez que escucho esas sevillanas que nostalgia de otros tiempos y de sueños de juventud