Salve, Rocío Divina Salve
con devoción te cantamos,
Madre, de los rocieros Madre
Reina de Pino-Montano.
Luz que alumbra al caminante
consuelo del peregrino,
que sueña con ver tu cara
y que por ti hace el camino.
Caminantes peregrinos
que anduvimos los senderos,
llevandote en nuestras almas
y rezandote en silencio.
Salve, Rocío Divina Salve
con devoción te cantamos,
Madre, de los rocieros Madre
Reina de Pino-Montano.
Puestos delante de ti
y postraos ante tus plantas,
te ofrecemos las promesas
y te cantamos plegarias.
Caminantes que pedimos
de tu Divina clemencia,
nos concedas cada año
volver ante tu presencia.
Salve, Rocío Divina Salve
con devoción te cantamos,
Madre, de los rocieros Madre
Reina de Pino-Montano.