I
Tengo una guitarra vieja
que me la quieren comprar
y yo no quiero venderla
por lo que voy a explicar:
Ella fue mi compañera
durante noches y días,
testigos de mis amores,
de mis penas y alegrías.
Con mi guitarra en la mano
yo le hice «conmovío»
mi primera sevillana
(y) a la Virgen del Rocío.
II
«Tan» diciendo que en Sevilla
se acaban los costaleros;
ay qué penita, qué pena
me da cuando escucho eso.
Aunque pasen muchos años,
aunque a Sevilla la cambien,
lo que nunca podrá ser:
falten brazos «pa» llevar
(y) al Señor del Gran Poder.
III
Mi Capillita del Puente,
de mi Puente de Triana,
donde rezaba mi “mare”
cuando por allí pasaba.
Aunque a Triana derriben,
aunque se hundan sus patios
y también sus viejas casas,
nadie podrá derribar
ni su arte ni su gracia.
IV
Al llegar la primavera
Sevilla se vuelve flor
«pa» subirse a la peana
de Jesús de La Pasión.
Flor en un paso de palio
y en balcones y plazuelas;
¡Sevilla jardín de España
(y) al llegar la primavera!.
Es una aportación de EL POETA PATATERO.
MIGUEL ANGEL
QUIEN CANTA ESTAS SEVILLANA