I
Lo malo de esta vida
pá condenarte,
la gloria si es que existe
pá compensarte.
Puede ser poco
el castigo y el premio
para este loco.
II
Para este loco que sueña
siempre contigo,
y al despertar del sueño
sufre el castigo.
De no tenerte
ni abrigar la esperanza
de poseerte.
III
De poseerte mi vida
que seas tu sola,
la que perfume el silencio
de nuestra alcoba.
Y en nuestra cama
se escuche entre suspiros
de que me amas.
IV
De que me amas mi niña
que ya no puedes,
vivir sin mis caricias
por que te mueres.
¡Ay quien pudiera
que este sueño despierto
se consiguiera.!