I
Te recuerdo, viejo árbol,
a la orillita del río, (bis)
donde a la sombra unos labios
jugueteaban con los míos.
Jugueteaban con los míos,
la tarde se fue despacio
y nos quedamos dormidos,
sentía el silencio del campo
del corazón sus latidos.
II
Le ofrecí la tarde a ella,
corrió sin miedo el amor,
era tan fresca la hierba,
diste cobijo a los dos
como al pájaro que llega.
Como al pájaro que llega
buscando un nido de amor
al entrar la primavera,
recuerdo un rayo de sol
que alumbró “pa” verla a ella.
III
Desperté mirando a ella,
se estaba poniendo el sol,
y esperaban las estrellas
“pa” que siguiera el amor
en esa noche tan bella.
En esa noche tan bella
nos abrazamos los dos
y salió la luna llena,
en tu rama se posó,
parecía que sonriera.
IV
Despertaba la mañana,
fue la luna con el río
hasta una charca lejana;
se llevó los sueños míos,
luego se perdió en el agua.
Luego se perdió en el agua,
el sol miraba escondido
entre eneales y cañas,
las gotitas de rocío
sobre tus hojas brillaban.
Estribillo:
Y ahora dirás, viejo árbol
de la orillita del río,
cómo pasaría de largo
sin sentir escalofrío.
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