I
Canto, el tambor y la flauta
estaban alzando a Dios;
el Pastor a los romeros
nos iba diciendo adiós.
ESTRIBILLO:
Ya suenan cohetes,
me monto a caballo,
me pongo el sombrero,
me tiemblan las carnes:
¡me voy de romero!
II
El sol doraba en la calle
los claveles y el romero,
los frontiles de los bueyes
y el rostro de los boyeros.
III
Las carretas llevan cante
y le hacen son una fuente;
¡viva esa Blanca Paloma!,
¡ole el Rocío y mi gente!
IV
En la carreta de plata
el «Simpecao» divino;
me santigüé bajo el cielo
«pa» comenzar el camino.
Es una aportación de EL POETA PATATERO
(elpoetapatatero@hotmail.com)